Aceites esenciales con flores

La aromaterapia es una tendencia al alza de la que seguro has oído hablar en más de una ocasión. Se trata de una terapia “natural” que puede aportarnos beneficios medicinales, perfumar nuestro hogar de manera natural e incluso prevenir problemas en la piel. 

A lo largo de la historia, los aceites esenciales se han utilizado para diferentes fines. Hoy en día se sigue recurriendo a ellos como elemento natural para satisfacer algunas de nuestras necesidades. ¿Quieres aprender más sobre los aceites esenciales? En este post te vamos a contar algunas propiedades que se les atribuyen a los aceites de flores más importantes. Si quieres aprender más sobre ellos y cómo puedes elaborar tú mismo/a tus propios aceites esenciales a base de flores naturales, ¡sigue leyendo! 

Cómo te ayudan los aceites esenciales a base de flores 

Algunas flores como la lavanda, el geranio, las rosas o el azahar, nos aportan múltiples beneficios que por lo general, desconocemos. Por eso, vamos a compartir contigo por qué pueden ser la opción perfecta para utilizarlas como base de tus aceites esenciales. 

- Aceite esencial de lavanda: La lavanda tiene múltiples propiedades calmantes y relajantes. Por eso, si lo utilizas en un difusor de aceites esenciales, además de dejar un aroma increíble en tu casa, podrás conciliar el sueño más rápido y de forma más profunda. 

- Aceite esencial de geranio: Este aceite esencial de geranio se caracteriza por su versatilidad. Se le atribuyen diferentes propiedades tópicas para reducir las imperfecciones de la piel. Además, te ayudará como repelente para insectos.  

- Aceite esencial de rosa: Uno de los aceites más utilizados en aromaterapia, por las cualidades que se le atribuyen. El aceite esencial de rosas nos equilibra mentalmente y nos permite utilizarlo tanto de día como de noche. 

- Aceite esencial de azahar: Es muy recomendado para el cuidado tópico. Sobre todo, para fomentar la cicatrización y la desaparición de estrías. 

Cómo hacer tu propio aceite esencial con flores 

Si quieres iniciarte en el mundo de los aceites esenciales DIY, tienes que saber que hay muchos métodos para hacerlo pero, hoy te vamos a dar algunos tips del método más fácil para que puedas comenzar. 

Una de las formas más comunes para obtener aceites esenciales es la destilación por vapor de agua, pero para esto necesitarás una herramienta más profesional como es el “destilador”, aunque hay personas que utilizan una olla a presión para que el proceso sea aun más artesanal. 

¿Qué vas a necesitar? Tienes que escoger tu flor favorita, de la que quieres extraer el aceite esencial. Puedes elegir la flor seca o fresca, aunque si te decides por la segunda opción deberás dejarla secar al sol. 

También necesitarás: un mortero, un recipiente, un colador y un frasco. 

¿Tienes ya elegida tu flor? ¡Perfecto! Cuando tu flor esté seca tienes que machacarla con un mortero. Después, calentar a fuego lento aceite vegetal (de oliva, de coco, de aguacate…) en un cazo, para añadir las flores después. En unas dos o 3 horas podrás colar el resultado y disfrutar de tu aceite esencial DIY a base de flores naturales. Te recomendamos guardarlo en un frasco con tapa para que su aroma dure mucho más. 

Además de hacerte disfrutar del proceso, el aceite esencial resultante te puede servir para muchas cosas. Por un lado, puedes convertirlo en un ambientador natural mezclándolo con agua y utilizarlo en un spray difusor. Por otro, puedes añadirlo a tus cremas para aportar un toque extra de aroma floral y… ¡todo lo que se te ocurra! 

Esperamos que este artículo te haya servido para aprender cosas que no sabías sobre la aromaterapia y que, te animes a fabricar tus propios aceites esenciales de flores. ¡Seguro que pronto empiezas a experimentar sus grandes beneficios! 

Como siempre, ¡gracias por leernos!